Ha pasado más de un año desde la aprobación de la Ley de Evaluación Ambiental, un nuevo acto normativo que establecía como principal objetivo la simplificación y agilización de procedimientos y que venía a sustituir y complementar todo un compendio de legislación en materia de Evaluación de Impacto Ambiental que hasta finales de 2013 convivía con otras múltiples y variadas obligaciones.
Autopista A-2 con Autopista de Circunvalación M-40, Madrid (2011). Foto: Nación Rotonda
Si bien cuando se publicó la Ley 21/2013 de Evaluación Ambiental se hizo especial hincapié por parte de la Administración en que el procedimiento administrativo se reducía a 4 meses, lo cierto es que dicha reducción de plazos sólo ha sido tal a efectos estadísticos. La realidad es que la “nueva” Ley considera que el trámite no comienza formalmente hasta que se ha realizado lo que ahora se llama “actuaciones previas” (las cuales conllevan meses), incluyendo entre ellas la fase de información pública.
Es cierto que una vez realizadas las “actuaciones previas” la Ley dice que se ha de resolver el trámite en el plazo de 4 meses, pero en realidad el procedimiento completo sigue sin bajar de 8 ó 10 meses en el mejor de los casos (con frecuencia, seguiremos hablando de años).
Este nuevo escenario, que sin duda es imprescindible abordar con detalle y donde el conocimiento de plazos y procedimientos toma mayor protagonismo que nunca, implica además una complejidad añadida para promotor y consultor. El motivo es que, al involucrar en mayor medida al órgano sustantivo, éste toma un papel más relevante independientemente de que no sea quien ha de promulgar la Declaración de Impacto Ambiental y, con frecuencia, tampoco conozca con detalle el procedimiento y menos los últimos cambios y particularidades.
¿Resultado? Que hay que estar más preparado que nunca y que los equipos y profesionales implicados en la redacción de Estudios de Impacto Ambiental deben desenvolverse con soltura en un compendio de plazos, entregas y análisis que seguro van a condicionar el correcto desarrollo del procedimiento. Ese es uno de los motivos por los que, el ISM pone ne marcha una serie de programas formativos en materia de gestión ambiental versión on line, entre los que destacan los que ponemos en marcha la semana que viene:
Especialista en Evaluación Ambiental y aplicación de medidas correctoras
